Como algunas de ustedes saben, el futbol es una de mis pasiones, sobre todo el femenil. Hago la distinción de género porque realmente consumo poco futbol profesional practicado por hombres. ¿Y qué tiene que ver este deporte con la música y el festival HERA? Todo y nada. ¿Lo primero? Estamos haciendo historia.
Pienso en la poca oportunidad que las mujeres hemos tenido en todos los ámbitos, y resulta fácil señalar las brechas de género que viven quienes se desempeñan en la industria deportiva y en la musical. Ambos han sido espacios dominados históricamente por hombres en el que también han existido las mujeres, pero muchas de ellas discriminadas y poco visibilizadas.
Entrenadoras, árbitras, jugadoras, directoras técnicas, médicas… muchas de ellas comenzaron a tener una oportunidad profesional hasta 2017, cuando se creó la Liga MX femenil en nuestro país. A pesar de que México participó en los primeros mundiales de futbol femenil en 1970 y 1971.
Mientras que productoras, músicas, camarógrafas, fotógrafas, ingenieras de audio o cantantes, han tenido pocos reflectores y oportunidades en México y el mundo. Según cifras gubernamentales de inicios de 2024, la fuerza laboral de músicos y músicas se distribuye en 94.5 % hombres, con un salario promedio de 6,700 pesos, y 5.5 % mujeres, con un salario promedio de 3,000 pesos mexicanos, ¡menos de la mitad!
Ya estoy escuchando a quienes dicen que las mujeres futbolistas y/o cantantes deben ganarse su lugar y que cuando vendan todas las entradas para un partido o para un concierto, según sea el caso, entonces podemos hablar de igualdad de género. ¿Pero cómo van a llenar recintos si no se les apoya de la misma forma que a los hombres?
El día que las mujeres recibamos los mismos reflectores, el mismo apoyo publicitario, las mismas oportunidades de vida, espacios equitativos en los medios de comunicación, los mismos escenarios, días y horarios prime time, etc., entonces hablamos.
Aclaro, sé que ambas industrias, deportiva y musical, son un negocio, ajá. ¿Y qué los negocios no requieren inversión? ¡Pues ya! Sigamos apostándole al talento de las mujeres y a su desarrollo, pero con pasos agigantados.
No es posible que a más de 100 años de que naciera Elvira Ríos, primera cantante mexicana con reconocimiento internacional, menos del 1 % de los eventos musicales en México tengan mujeres como protagonistas, o que el 75% de todos los actos de los festivales en México sean realizados por hombres, según datos de 2023 de la organización Sonoridad MX.
En 2012 del total de festivales, apenas el 9% de los actos eran femeninos y ese es un número bajo si lo comparamos con el 30% registrado en eventos de 2023.
Y bueno, ya sé que un festival protagonizado por mujeres no es el único esfuerzo que debería hacerse para conseguir equidad de género en los escenarios y en el resto de la industria, pero es un buen salto para seguir acortando la brecha, para abonar a la deuda histórica con las mujeres y para reconocer el espacio que ellas se merecen.
Gracias Ximena Sariñana y gracias Francisca Valenzuela por organizar el Festival HERA y gracias al resto de las mujeres que lo hicieron posible, porque como decimos en Emma: “Somos fruto de la lucha de muchas mujeres”.
Nos vemos el próximo sábado 24 de agosto en la curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez, para ser parte de la historia.