40 horas laborales pueden balancear el trabajo no remunerado
A las mujeres no nos ayudan, también les corresponde
Desde pequeña, mi mamá y mi papá me enseñaron a cumplir con las tareas del hogar de la misma forma que a mis dos hermanas y a mi hermano. Pero las reglas cambiaban cuando visitábamos a la familia; en Zacatecas normalicé escuchar a mi abuela decir: “los hombres en la cocina huelen a caca de gallina”.
Conforme fui creciendo, me di cuenta de que esa frase, y otras del tipo, me incomodaban y hasta me parecían injustas. Luego me convertí en la rebelde de la familia, intentando no responder a ese “mandato de ser mujer” sin saber siquiera que se trataba de ir en contra de un estereotipo de género.
Por años y años, las mujeres hemos sido relegadas al espacio privado, y socialmente nos han impuesto ser las que “debemos” atender las tareas domésticas y de cuidado. Pero, ¿qué pasaría si el gobierno y el sector empresarial también se involucran haciendo lo que les toca y no nos lo dejan todo a nosotras? Seguro la balanza se empareja, al menos, un poquito más rápido.
Aquí viene la relación con la iniciativa de reforma para pasar de 48 a 40 horas laborales a la semana en México. Al aprobarse, permitiría que todas las personas tuvieran más tiempo para descansar, convivir con la familia y, claro, que se den las condiciones para contribuir con las tareas domésticas, de crianza y de cuidado que actualmente están recargadas principalmente en las mujeres.
Ese sería un buen paso, aunque no el único. No podemos obviar que más tiempo libre es estrictamente igual a más tiempo dedicado a ese tipo de quehaceres. Por eso es importante que se generen campañas de concientización en la sociedad.
Por ejemplo, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) propone romper los roles de género desde la infancia para lograr distribuir de forma equitativa el trabajo no remunerado. Para ello madres, padres y/o tutoras y tutores juegan un rol clave en el momento en el que deciden con qué actividades debe apoyar cada uno de los miembros de la familia.
Las mujeres trabajamos casi 3 veces más
Ya sabemos que los quehaceres del hogar y de cuidado son indispensables para el desarrollo del país, pero no deberían ser solo responsabilidad de las mujeres, sino de todas las personas que habiten en un mismo espacio
En nuestro país, nosotras aportamos 2.6 veces más valor económico que los hombres en trabajo no remunerado. En 2022, el valor económico de las tareas del hogar y de cuidados fue de 7.2 billones de pesos. De esa cantidad, ¡72% lo aportamos las mujeres!
El sector empresarial está en contra
El sector empresarial se ha manifestado en contra de reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana afirmando que afectaría la competitividad y la productividad, o que es mejor que se trabaje más para ganar más. Algunos de los que han sostenido esa postura son Carlos Slim, Alejandro Gómez Tamez, Francisco Cervantes, Pablo Alcocer Góngora, entre otros.
Pero también hay que escuchar a la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la cual asegura que trabajar más no garantiza más productividad: “El exceso de trabajo puede contribuir a una mayor incidencia de accidentes y lesiones, a que haya una menor productividad y peor calidad de vida”.
“Lo vemos el siguiente año”
El año pasado, la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados determinó dejar para este 2024 (según, en marzo) la votación de la reforma laboral para reducir las horas de trabajo a la semana.
Esperemos que al votar, también se considere que “la mayoría de los mexicanos que laboran más de lo establecido por ley pertenecen a hogares con menos ingresos (entre $3 mil 313 y $9 mil 186 pesos mensuales promedio)”, según datos del IMCO.
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