¡Ganamos en softbol! ¿Y el béisbol femenil profesional?

El softbol femenil arrancó en México

Cuando me enteré de que en México arrancaría una liga de softbol femenil profesional me dio mucha emoción pensar en la alegría que sintieron las casi 11 mil mujeres que están afiliadas a la Federación Mexicana de Softbol y en las miles más que no están en ese censo. Pensé en esa energía que me recorrió el cuerpo y que me hizo saltar cuando yo, que soy una ‘fifas’, me enteré del surgimiento de la Liga MX femenil en 2016.

Obviamente lo vemos como algo positivo; siempre que se trate de que las niñas tengan referentes femeninos en el deporte, o en cualquier otro ámbito, será motivo de orgullo y festejo. Sin embargo, me parece importante cuestionar ¿por qué una liga profesional de softbol y no de béisbol?

A esta pregunta, Horacio de la Vega, presidente de la Liga Mexicana de Béisbol y Softbol, respondió que “el béisbol femenil lleva poco tiempo, entre comillas, estamos hablando cerca de 10 años, que encontraron un modelo mucho más sólido de desarrollo. El softbol lleva décadas”, asegurando que la base en softbol “es gigantesca”.

La razón de De la Vega suena lógica si consideramos, de forma simplista, que entre más años se tenga practicando un deporte y más grande sea tu universo, tienes más competencia, mejor nivel y, por ende, un mejor espectáculo; lo que se traduciría en buenas entradas al estadio y altas probabilidades de crecer rápidamente la afición.

Ok, te la “compramos” Horacio. Pero lo que ya no “compramos” es el contexto social que sigue reproduciendo la falta de oportunidades para las mujeres en distintos espacios; en este caso en el béisbol.

Por ejemplo, la sinaloense Arisdelsy Higuera es una de las mujeres que se enamoró del béisbol y que lo practicó un tiempo con varones, pero como quería desarrollar una carrera en ese deporte, tuvo que irse a lo más cercano que tenían las mujeres; el softbol.

Aclaro, no se trata de minimizar este deporte o de decir que está mal jugarlo, el problema es que no se tenga la oportunidad de elegir entre estas dos disciplinas porque una (el béisbol) no tiene la suficiente infraestructura para, al menos seguir practicándolo; pero si se piensa en un desarrollo profesional (siendo mujer), aunque ya no es imposible.

La selección mexicana de béisbol femenil consiguió, por primera vez, su pase a la fase final del mundial de Canadá que se disputará este año, a pesar de no contar con una liga profesional ¡y de curtirse en el llano! Un logro similar al del equipo de mexicanas que consiguió el cuarto lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en softbol: sin liga profesional, aunque con la experiencia de las mexicoamericanas que tienen más oportunidades en Estados Unidos.

Ahora hace falta que las olimpiadas dejen de encasillarnos, y gran parte de la sociedad, pues “aunque hay campeonatos mundiales masculinos y femeninos en ambos deportes, a nivel olímpico el béisbol ha sido un deporte exclusivamente masculino, mientras que el softbol ha sido un deporte exclusivamente femenino”.

Ojalá que las diferencias para las mujeres entre el béisbol y el softbol se queden en el color y tamaño de la pelota; en el material del bat; en si el área de pitcheo tiene una placa o solo un círculo; en el tamaño del campo; etc., y no en las oportunidades que se ofrecen para destacar en cada uno de ellos.