Por: Olga Trujillo
La ausencia femenina en los Juegos Olímpicos en su momento fue una tragedia
En Amsterdam 1928 las mujeres corrieron por primera vez la prueba de los 800 metros en unos Juegos Olímpicos. La agitación era notable en sus rostros boquiabiertos al momento de llegar a la meta. Algunas se desvanecieron en el piso. Y el escándalo se desató. ¿Quién les había permitido competir en esa prueba si los doctores ya habían dicho que podrían envejecer más rápido? ¿Cómo hacerles ver que su salud corría riesgo?
Nadie pudo conseguir pruebas de ningún tipo para confirmar esas aseveraciones y los involucrados no dudaron en dar el siguiente paso. Desde esa edición, los líderes del atletismo prohibieron cualquier carrera de más de 200 metros para las mujeres. Es decir, ya no podrían correr más de media pista. Los 800 metros femeninos se permitieron de nuevo hasta Roma 1960. ¿Cuántas historias de resistencia se silenciaron en esos 32 años?
La novedad de los Juegos Olímpicos de París 2024 es que, después de casi 130 años de llevarse a cabo, por fin se logró la paridad entre mujeres y hombres. Cinco mil 250 atletas de cada género participarán en 46 deportes. ¿Por qué se tardó tanto tiempo en llegar a esto?
Las historias que las atletas de los 800 metros remontaron en los Juegos Olímpicos se acercan a una respuesta. Pero no son las únicas. En los deportes de combate, directivos como Henri de Baillet-Latour (en 1929), opinaban que las mujeres debían “limitarse a los deportes estrictamente femeninos”, pues “no eran aptas para recibir golpes y sus mamás podrían dañarse”. Así, el boxeo femenino subió al ring 108 años más tarde que el varonil.
En el futbol los hombres jugaban desde París 1900. En cambio, el femenil tuvo que remontar vergonzosos vetos que se conspiraron desde Inglaterra en 1921, donde las trabajadoras de la fábrica de municiones de Preston, del equipo Dick Kerr´s Ladies, ya llenaban estadios. Las futbolistas saltaron al empastado hasta Atlanta 1996.
Por último, en la maratón, se creía que las largas distancias podrían perjudicar el útero y la capacidad para gestar de las mujeres. Por eso, a pesar de que los varones compitieron desde Atenas 1896, el reclamo de las corredoras fue escuchado hasta Los Ángeles 1984.
Lo que hoy puede sonar como una comedia, en su tiempo realmente fue una tragedia. En París 2024 por primera vez en la historia la maratón femenil cerrará el calendario olímpico.
La ruta perseguirá las huellas de la “Marcha de octubre” de 1789 , cuando un grupo de mujeres caminó del Ayuntamiento de París hasta Versalles y llevó al Rey Luis XVI a las Tullerías. Su movimiento se tradujo en el fin de la monarquía absoluta en Francia. Simbólico cierre para una remontada que ha costado más de un siglo.
Sobre la autora
Olga Trujillo es periodista deportiva mexicana. Invierte sus horas como editora digital (región Latam) de olympics.com, el sitio oficial del Comité Olímpico Internacional. Le apasiona el guionismo enfocado en deportes femeninos. Parió Diosas Olímpicas desde hace 12 años inspirada en su casa de estudios la FCPyS de la UNAM. Desde entonces difunde y promueve el deporte femenil con perspectiva de género como disciplina de alto rendimiento.
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